La sofro-relajación

¿Qué es la Sofro-relajación?

La Sofro-relajación consiste en técnicas de respiración y visualización para relajarse, aliviar el estrés, prepararse para exámenes, competiciones deportivas, operaciones quirúrgicas que nos angustian, recuperar el sueño, detener las adicciones (alcohol, tabaco, juegos, medicamentos…).
Utilizo la Sofro-relajación en casos específicos como acompañamiento en pequeñas situaciones de estrés de la vida cotidiana. Para las personas que nunca han tenido acceso a todas las técnicas de trabajo en sí, la Sofro-relajación puede ser una puerta de entrada suave y amable.
También ofrezco sesiones de sofrología a grupos de empresa (entre 5 y 15 personas) para ayudar al equipo a manejar su estrés, aprender a relajarse y por lo tanto a ser más eficiente.

Pequeño ejercicio para practicar tú mismo a la hora de relajarte:
Siéntete cómodamente en un sofá o espacio que te guste. Encuentra la posición en la que te sientas mejor. Apoya los pies en el suelo y evita cruzar las manos y las piernas. Cierra los ojos y respira 3 veces profundamente inflando bien el vientre y exhalando completamente a tu ritmo. Luego, imagina una ola de relajación que viene por encima de tu cabeza y va a descender dentro de ti, de la cabeza a los pies. Imagina, visualiza, siente esta ola de relajación que comienza a entrar en ti, por la parte superior de tu cabeza. Esta ola comienza por relajar tu frente, tus ojos, tus párpados, tu nariz. Puedes sentir el aire entrando y saliendo de tus fosas nasales. Siente la relajación que te invade y tus mejillas se relajan, así como tu boca, tu mandíbula se puede entreabrir, puedes querer salivar o bostezar, adelante, es una buena señal de relajación. Ahora es toda tu cara la que está relajada. Y esta ola de relajación continuará descendiendo a tu cuerpo. Puedes sentirla, visualizarla, imaginarla penetrando en tu cuello y relajando tu garganta. Y esta relajación continúa en tu pecho, tu vientre, todos tus órganos, todas tus células. Y tus brazos también se relajan cada vez más, desde los hombros hasta las yemas de los dedos. Ahora es la parte superior de tu cuerpo la que está relajada y te sientes mejor y mejor. Luego, imaginas, visualizas, sientes la onda de relajación que desciende por tus piernas hasta los dedos de los pies. Tómate el tiempo para dejar que esta ola de relajación descienda, para sentirte completamente relajado en todo tu cuerpo. Disfruta de este momento de bienestar…

Cuanto más lo practiques, más rápido y fácil será. Adelante…

Sugerencia: puedes grabarte mientras lees este texto. Así, podrás relajarte escuchando tu propia voz sin tener que leer el texto.